Traducido y adaptado desde esta fuente original. Autora NANCY WEINSTEIN


El traductor no se identifica necesariamente con todas las afirmaciones vertidas en el texto.

El contenido del mismo puede dar mucho juego para la reflexión y el debate.


Todos los docentes coincidimos en que si somos capaces de medir eficientemente las fortalezas y debilidades cognitivas de nuestros estudiantes, podremos  utilizar esta información para mejorar los resultados en su proceso de aprendizaje.

El debate sobre si la tecnología puede «revolucionar» el aprendizaje personalizado, es algo que se percibe como fugaz y poco práctico para la mayoría de los docentes. Incluso las plataformas más adaptativas no tienen en cuenta que los estudiantes necesitan diferentes enfoques, no sólo más actividades prácticas. Y es simplemente poco realista esperar que los maestros puedan diseñar soluciones individualizadas para cada estudiante a lo largo de cada curso académico.

Algunos autores proponen que la respuesta está simplemente en los estilos de aprendizaje. Me gustaría entender las complejidades de los individuos fueran tan fácilmente comprensibles como Myers-Briggs nos propone. Su prueba sugiere que si los estudiantes responden a un cierto número de preguntas, podemos descubrir sus tipos de personalidad: si son «introvertidos» o «extrovertidos«, «pensadores pragmáticos» o «reflexivos«, o cualquiera de las 16 categorías que supuestamente revelan cómo inspirar, enseñar y ayudar.

¿Pensamos realmente que es así de sencillo?

Por desgracia, el Myers-Briggs, al igual que otras pruebas sobre canales perceptivos, estilos de personalidad,  o de aprendizaje, simplemente no funcionan. El ser humano es demasiado complejo. En términos científicos, Myers-Briggs y los inventarios tipo «estilo de aprendizaje» no son fiables: si se le da la misma persona la misma prueba en un día diferente, sus resultados no son susceptibles de ser coherentes.

El veredicto científico: estas pruebas no son de mucha ayuda. De hecho, pueden imponer limitaciones engañosas.

Así que si estamos ya en la era del aprendizaje personalizado pero por otro lado, no contamos con una solución práctica y fiable…, ¿Que les podemos decir a los educadores?

La comprensión de las evaluaciones cognitivas (*)

¿Qué ocurre cuando planteamos una evaluación cognitiva? Estas son las únicas pruebas que los científicos afirman como verdaderos predictores válidos y fiables sobre cómo los niños aprenden mejor y cómo mejorar sus prácticas. Si evaluamos a un niño en distintos días deberíamos obtener  los mismos resultados. Estos resultados nos pueden permitir anticipar y prevenir muchos problemas en lugar de reaccionar después.

Sin embargo, a pesar de la abrumadora evidencia en apoyo de las evaluaciones cognitivas, frecuentemente no son bien entendidos por la mayoría de los profesionales de la educación, ya que, históricamente, no han sido unas opciones realistas y asequibles. A continuación, planteamos conceptos erróneos comunes sobre las evaluaciones cognitivas.

  1. «Las evaluaciones cognitivas sólo son útiles para los niños con necesidades especiales». De hecho, todas las personas, no importa su nivel, tienen una combinación única de fortalezas y debilidades. La comprensión de esta combinación permite a los profesores conectar de manera más eficiente y personalizar la instrucción para cada alumno. ¿Sabías que Einstein suspendió la parte de lengua de su examen de ingreso a la universidad?
  2. «Las evaluaciones cognitivas requieren demasiado tiempo a la hora de administrarlas para ser prácticas.» Sí, de hecho, las evaluaciones cognitivas tradicionales requieren entre 5 y 10 horas de tiempo (uno-a-uno con un profesional certificado), y puede que no son prácticas para trabajar con todos los estudiantes. Sin embargo, los nuevos modelos de evaluaciones en línea auto-administrados se pueden realizar en menos de una hora y en un ambiente de grupo sin necesidad de trabajar 1×1.
  3. «Las evaluaciones cognitivas son demasiado caras.» Una evaluación psico-educativa tradicional puede suponer mucho dinero. Las evaluaciones en línea pueden costar menos de € 100 por estudiante, haciéndolas de esta manera, asequibles para muchas escuelas.
  4. «La evaluación de más estudiantes nos obligará a tener que diseñar planes personalizados que, a su vez,  nos costará más dinero.» En los casos en los que una evaluación revela una debilidad cognitiva previamente no identificada, existe la posibilidad de un plan personalizado. Sin embargo, la identificación temprana de «debilidades» (dificultades) de aprendizaje puede reducir las futuras necesidades especiales. De hecho, en la mayoría de los casos, los maestros emplean la información que surge de la evaluación para dar a los niños un apoyo más cómodo y eficiente sin necesidad de posteriores adaptaciones especiales.
  5. «Comunicar a los niños que tienen una «debilidad» dañará su autoestima.» Cuando la información se maneja adecuadamente, y se ayuda a los niños a ser más conscientes de sí mismos o como avanzar hacia la metacognición, en realidad, se aumenta la autoestima. Cuando tienen éxito, ésta aumentará.
  6. «Incluso si entendemos cómo un niño aprende, sigue siendo difícil de apoyar las necesidades individuales.» De hecho, los maestros ya lo hacen, pero sin estrategias coherentes y prácticas disponibles a su alcance y sin contar con datos objetivos de los estudiantes para validar sus opciones. Una herramienta en línea proporciona la capacidad de tener algoritmos que coinciden con el perfil de un niño con las estrategias de aprendizaje basadas en investigaciones específicas y aplicaciones que pueden ser más eficaces. ¿Tiene un niño con una fuerte memoria visual?: Utiliza aplicaciones con fotos y gráficos para representar la información y para ayudarle a entender y recordar. ¿Hay en su clase un estudiante con problemas para escuchar:. Asegúrate de que la aplicación que está utilizando tiene subtítulos o utiliza una voz clara y sin ruidos de fondo. ¿Alumnos con problemas con la atención?: Puedes sugerirle que utilice un temporizador para mantenerlo en la tarea durante el tiempo de trabajo. La investigación nos informa de todo lo que funciona bien, pero nunca antes ha habido una opción para integrar rápidamente buenas técnicas, herramientas y aplicaciones para cada situación y para las habilidades cognitivas de un niño en particular.

Mindprint es una opción para estas tareas desarrollado en el Brain Behavior Lab at Penn Medicine.  Las estrategias de aprendizaje fueron diseñadas por un equipo de psicólogos infantiles y especialistas en aprendizaje. Se trata de una respuesta global: desde la evaluación, los resultados hasta  la «Caja de herramientas de estrategias y aplicaciones» que apoyan las habilidades cognitivas de aprendizaje recomendadas-. Otro tipo de recomendaciones personalizadas están en la cuenta privada del niño, con acceso restringido por parte padres y educadores, para fomentar el éxito en la escuela y en casa.

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(*) Es una prueba que evalúa la metodología de estudio y las estrategias cognitivas que cada estudiante utiliza para comprender un texto o resolver situaciones problemáticas. No es un test de inteligencia ni de personalidad. Nichols (1994) utilizó el término “evaluación cognitiva diagnóstica”, con el propósito de capturar la integración de la psicología cognitiva en el diseño e interpretación de los resultados de evaluaciones, así como en la elaboración de diagnósticos sobre las características del estudiantado en cuanto a sus procesos cognitivos.