La pasada semana tuvo lugar en Madrid el Salón de Tecnología para la Enseñanza, SIMO, y creo que es una oportunidad única para reflexionar sobre el papel de la tecnologías en las aulas actuales y en las del mañana.

El mundo ha cambiado enormemente en los últimos años, lo que se ha trasladado a las escuelas. Es por todos conocido el modelo SAMR, del profesor Puentedura, para la mejora de la integración de las TIC, pasando de una educación analógica a una digital. Establece dos capas, una de mejora y otra de transformación, cada una conformada por dos niveles. De esta forma hay que partir por sustituir elementos tradicionales por tecnológicos (sustitución) produciendo mejoras sustanciales (aumentación) para modificar la definición de tareas (modificación) con objeto de que los alumnos sean capaces de crear materiales que mejoren su aprendizaje (redefinición).

 

¿Por qué la tecnología en las aulas?

La implantación de la tecnología en el aula ha tenido un gran impacto en la educación, con ventajas pero también inconvenientes. Es indudable que, bien gestionada, mejora la competencia del alumnado, aumentando su autonomía y creatividad, a la vez que desarrollando nuevas habilidades tecnológicas y personales, fomentando el aprendizaje participativo y colaborativo, favoreciendo el aprendizaje para todos y en cualquier momento y lugar, con un ritmo personalizado y adaptándose a alumno con necesidades educativas especiales.

La adecuada gestión de es fundamental y su uso implica una serie de retos, como es el proporcionar una adecuada formación a todos los usuarios, profesorado y alumnos, que adquieran una competencia digital óptima. No podemos olvidar el contar con unos medios e infraestructuras adecuadas así como un cambio en el paradigma educativo y en los sistemas de evaluación, adaptando todo esto a una nueva realidad.

 

De las TIC’s a las TAC’s

Mucho se ha oído y se oye hablar de las TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación), pero es fundamenta el pasar  a implementar adecuadamente un nuevo concepto, formulado por el Prof. Vivancos: las TAC o Tecnologías del Aprendizaje y el Conocimiento, que se centran en las nuevas posibilidades que ofrece la tecnología para la educación, de manera que se consideran más que una herramienta, son un elemento fundamental para desarrollar el conocimiento y el aprendizaje del alumnado.

La correcta combinación y uso de las TIC-TAC favorecerá la motivación y la creatividad del alumnado, así como la sinergia profesor-alumno-alumnos.