Metacognición: puerta para aprendizaje significativo.

Comienza un nuevo año académico y con él nuevas expectativas para este curso. 

¿Por qué algunos alumnos trabajan en equipo muy bien, mientras que otros no consiguen buenos resultados?, ¿Por qué pierden tanto el tiempo unos y otros no?, ¿Por qué hay alumnos que según quién forme parte de su equipo, dejan de trabajar o de tener la valía que de manera individual muestran?

Para este septiembre os ofrezco una herramienta que nos puede servir para trabajar en equipo de manera más eficaz. Se trata de una rueda de negociación y sistematización del trabajo que puede ser muy útil para estos primeros días de clase. 

Su objetivo es crear hábitos desde el primer día de clase que sirvan para alumnos de todas las edades, y persigue la misión de mostrar hábitos de trabajo y herramientas de aprendizaje que puedan ser entrenados y consolidados en cada clase para que cada alumno los elija como buen itinerario con libertad cada vez que lo necesite. Con ella, los alumnos pueden ir adquiriendo orden, sistematización en el trabajo y objetivos claros para la consecución de las tareas asignadas por el profesor.

Ideé esta rueda de trabajo cooperativo porque me preocupa los niveles de ansiedad y estrés que descubro en algunos de mis alumnos cuando su trabajo no es eficaz.

La ansiedad y el estrés hay que educarlos porque son buenos aliados cuando los sabemos controlar. A la vez la ansiedad puede ser una gran enemiga cuando nos lleva a bajar los brazos porque descubrimos que los resultados no son instantáneos. Según Noam Chomsky, vivimos en la «cultura del miedo»…Tenemos una manía por el control. (Así te mata la ansiedad. Isabel Serrano-Rosa es directora y psicóloga de EnPositivosí.)

A los alumnos debemos enseñarles desde que son pequeños, herramientas, que sean sus raíces y motores del futuro. Es necesario quitarles prejuicios que les ayuden a aprender del otro, a agradecer y a disfrutar de los pequeños regalos de cada día, enseñarles a ser más observadores, menos negativos ante su propio trabajo y el de sus compañeros y así detenerse ante las cosas simples y agradables que les proporciona cada día. En definitiva, enseñar a organizar y planificar su trabajo, a aprender a gestionar su tiempo, y descubrir lo que valen, que muchas veces no se lo creen.

Para que la rueda de cooperativo sea eficaz, necesitamos  incluir en el aula la cultura del silencio. Solo de esta manera serán capaces de escuchar su propia creatividad. Por lo tanto, no tengamos miedo al silencio reflexivo en el aula, y creemos a diario en ellas espacios de silencio y de reflexión personal. En definitiva de metacognicion y por lo tanto de aprendizaje eficaz.

<<Hemos oído hablar de multitasking. En la mayoría de los casos lo que produce es distracción y nos impide ir más allá de la superficie por falta de concentración y de tiempo>> (Enfocar la atención.@luisblazquez. Director de Interaxion)

Podemos tener alumnos muy “atareados” pero muy poco profundos o reflexivos, muy rápidos pero muy poco eficaces.

<<Existe una creencia ampliamente extendida -y errónea-que considera que la experiencia del esfuerzo en sí es peor que la del placer…En realidad es la forma de enseñanza la que generalmente es amarga y no el aprendizaje. Muchas actividades están tan mal diseñadas que al final producen ansiedad o aburrimiento.>> (Enfocar la atención. @luisblazquez. Director de Interaxion)

Cada profesor tiene por tarea explotar globos erróneos sobre el aprendizaje que la sociedad se ha encargado de anclar en las mentes de sus alumnos desde muy pequeños.

Crear hábitos de trabajo les ayudará a elegir en el futuro el tipo de herramientas de aprendizaje que mejor se ajuste a su forma de ser. A todos nos gusta enseñar a trabajar en equipo, y toda la naturaleza que hay a nuestro alrededor siempre trabaja de esta manera.

Con la rueda de negociación queremos conquistar en cada alumno competencias como: 

-Conciencia de uno mismo, generando confianza en mi equipo. (Autoconfianza)

-Análisis, Síntesis y crítica. (Pensamiento Crítico)

-Habilidades de comunicación. Aumentar el compromiso con el equipo de trabajo.

-Responsabilidad y perseverancia en el trabajo comenzado.

-Toma de decisiones, sin detenerse por inseguridad por miedo a cometer errores, y quedar mal ante los demás compañeros. Evitar la ansiedad que sienten nuestro alumnos por no saber afrontar una tarea o del tiempo que pierden por no saber reorganizarse al fallarles la estructuración del tiempo o la dirección hacia donde quieren llegar. 

-Orientación al compañero.

El trabajo es como un juego. Tiene objetivos, reglas claras y nos obliga a poner en práctica ciertas habilidades. Pero muchas veces vemos que no todos nuestros alumnos son capaces de mantener la atención en el trabajo comenzado.

Todos sabemos que nuestros alumnos quieren que sus trabajos sean eficaces y les sirva para recordar lo aprendido, sintiendo así satisfacción por el trabajo hecho por ellos o por otros compañeros, pero compruebo que no tienen un sistema de trabajo serio y constante que les lleve a conquistar este deseo. Aprenden con mucha ilusión por sí mismos (con vídeos tutoriales de Internet) cuando algo les interesa de verdad, por lo tanto, algún error estamos cometiendo en nuestra metodología de aula cuando no inspiramos deseos de aprender. Hagamos de nuestras aulas lugares de reflexión y de ilusión por la cultura.

Mercedes Molina León. Psicopedagoga.