PEDAGOGíA DE AUTOR

Homenaje a todos los “educautores”

            Según el Diccionario de la lengua española de la RAE, “cantautor, ra” es el “cantante, por lo común solista, que suele ser autor de sus propias composiciones, en las que prevalece sobre la música un mensaje de intención crítica o poética.”

            Por qué no pedir a nuestros académicos de la RAE que acuñen la palabra “educautor, ra” para referirse al “educador, por lo común solista porque ejecuta en solitario su pedagogía, que suele ser autor de sus propias clases, en las que prevalece sobre los contenidos un mensaje de pensamiento crítico y creativo.”

            Ese soy yo, y muy probablemente tú si estás leyendo esta humilde reflexión. Para ti y los que son como tú y como yo va este humilde homenaje:

  • porque un día tuvimos la suerte de poder dedicarnos al “ARTE DE EDUCAR”;
  • porque un día miramos a los ojos de nuestros alumnos, evaluamos su mirada, no sólo su aprendizaje, y  como espejo del alma no nos gustó lo que vimos;
  • porque entonces dejamos de pensar en nosotros para pensar en ellos y de enseñar para aprender de ellos;
  • y así nos dimos cuenta de que su vida no es ni está en el aula, ni en los libros de texto, y menos la vida para la que los educamos. Su vida y la que será están fuera del aula, incluso del colegio, y es muy diferente a la nuestra y a la que fue cuando teníamos su edad;
  • por eso, abrimos las ventanas, salimos volando con nuestra imaginación, renovamos nuestro armario educativo por cambio de temporada, y volvimos con los pies en la tierra cargados de ilusiones, sueños y creatividad. Salimos de nuestra “zona de confort”.

            Y ahí seguimos, contra viento y marea, remando en la dirección contraria a la mayoría de nuestra tripulación. Pero no nos importa, porque a pesar de todo, seguimos teniendo la suerte de mirar a los ojos de nuestros alumnos, evaluar su mirada, no sólo su aprendizaje, y como espejo del alma ahora si nos gusta lo que vemos.

            Gracias a todos los que me inspiráis cada día en mi “empresa educativa”: grandes, medianos, pequeños, especialmente, a los “educautores” rasos como yo.