¿Existe algo mejor que resolver un problema de matemáticas?

Si, existe. Un problema de matemáticas que venga asociado a un reto que, además, les vincula con un aprendizaje significativo sobre la identidad cultural que conforman, en el caso de mis alumnos, nuestras islas.

No pretendo realizar una aproximación exhaustiva al concepto de gamificación en matemáticas, pero sí me voy a centrar en las ventajas que proporciona para el aprendizaje de ésta.

Mucho antes de saber que se llamaba gamificación, ya la aplicábamos (aun sin darnos cuenta). Cuando proponemos un reto y una recompensa a nuestros alumnos, estamos gamificando, aunque de una forma un tanto rudimentaria. El concepto gamificación se puede definir como el uso de mecánicas de juego en entornos ajenos al juego y, aunque todavía existen detractores del uso de entornos gamificados en educación, se encuentra ampliamente extendida. En lo que aquí nos ocupa, la gamificación puede contribuir a dicho aprendizaje de varias maneras:

  • Fidelización: el alumno se siente más vinculado al contenido matemático que se está trabajando, cambia su perspectiva ante una expectativa, la recompensa.
  • Motivación: Si el alumno se siente estimulado por un reto o por alcanzar una meta, participará de forma más activa en su proceso de aprendizaje y, además, es una manera de combatir el aburrimiento.
  • Evaluación: los alumnos pueden ser constantemente evaluados sin que sientan la presión de una evaluación al uso. La cantidad de datos útiles que se pueden obtener es enorme.

Quizás sea este último aspecto el más descuidado cuando se realizan procesos de gamificación, pues muchas veces nos centramos en la preparación de la actividad y pocas en la recogida y análisis de datos, casi siempre en entornos virtuales, para mejorar el aprendizaje

Vamos a verlo con un ejemplo:

Me interesa hacer un seguimiento de las habilidades que mis alumnos han adquirido sobre la resolución de las ecuaciones trigonométricas. Por tanto, como es obvio, lo que quiero medir es si saben o no resolver dichas ecuaciones; pero ¿y si además le añadimos un contexto de gamificación? Pues se sentirán más motivados a resolver dichos ejercicios.

Y esto, ¿cómo se hace? Creando una narrativa que les induzca a descubrir aspectos históricos o culturales de nuestro entorno. De la siguiente manera:

“1482. Hernán Peraza intervino en la conquista de Gran Canaria, con un numeroso contingente de gomeros. La captura de Tenesor Semidán, guanarteme de Gáldar, por parte de Alonso Fernández de Lugo y Hernán Peraza, será un factor decisivo para la culminación de la conquista. Tenesor Semidán fue enviado a Castilla, donde se entrevistó con los Reyes y fue bautizado con el nombre de Fernando Guanarteme; se convirtió en un fiel y valioso aliado de los conquistadores.

En el Palacio Real de Tordesillas, el rey Fernando le habla a Guanarteme de los lugares más impresionantes y mágicos de todo su dominio. Para su sorpresa, el canario le dice que el lugar más místico de todo el reino se encuentra en su tierra natal y que las tropas castellanas no habían sido capaces de encontrarlo.

¿Quieres saber cuál es ese lugar y por qué es tan extraordinario?

Para descubrir este sitio tienes que escanear el siguiente código qr que te llevará a un pdf encriptado. La clave que abre dicho documento son las letras de los apartados que es la respuesta correcta de cada pregunta.”

Ellos querrán encontrar la clave, lo que les llevará a resolver los problemas de ecuaciones trigonométricas. Yo que resuelvan dichas preguntas y que, además, se diviertan.

Se ha generado así un estupendo escenario de aprendizaje en el que, además, de aprender matemáticas descubren el Maipés de Agaete, un amplio espacio funerario de la cultura aborigen que cuenta con 700 tumbas troncocónicas (que alcanzan los 8 m. de diámetro por 3 m. de altura) de los antiguos canarios, algunas de las cuales fueron realizadas hace ya más de 1.300 años.

La Sociedad Canaria de Profesores de Matemáticas en su revista Números del mes de noviembre se hizo eco, con la publicación de un extenso monográfico, de esta forma de trabajar las matemáticas que aplicamos desde hace tiempo en mi colegio.