Estos días, preparando con tranquilidad las asignaturas para el próximo curso, me estoy centrando en dos temas que quiero incorporar a mis clases: la modalidad de flip en clase y el aprendizaje adaptativo.
Si hay un principio del Flipped Learning que me atrae especialmente, es la posibilidad que ofrece de atender de manera individualizada a los diferentes ritmos y niveles de aula. Tanto a los que están en niveles más bajos, como a los que sobrepasan ampliamente el nivel, y que generalmente dejamos algo más olvidados.
La modalidad flip en clase, permite supervisar esos niveles directamente en el aula y posibilita el trabajo de varios temas simultáneamente, segmentando el grupo de clase en diferentes grupos, según su evolución.
En principio, el uso más habitual de la modalidad flip en clase es atender a alumnos con más dificultades o para aquellos alumnos que por la razón que sea, no hayan podido ver los vídeos en sus casas, los vean en clase y poder de esta forma engancharse al resto del grupo. Sin embargo, si lo asociamos con la filosofía del aprendizaje adaptativo, podemos usar esta modalidad para atender de forma individualizada y guiada a todos los niveles de aula con la supervisión directa del profesor.
El objetivo del aprendizaje adaptativo, es que el proceso que sigue el alumno sea lo más personal posible. Que aquellos alumnos que van más rápido, puedan acceder a una mayor cantidad de recursos y aquellos que van más lentos refuercen con garantías aquellos conceptos que consideramos fundamentales. La idea es que el contenido se adapte a las necesidades académicas del alumno, a medida que vaya superando etapas.
Aplicación Vidzor
Para realizar esta combinación hay una aplicación llamada Vidzor que permite automatizar este proceso de aprendizaje adaptativo. Posee una cuenta gratuita que nos permite realizar cuantos proyectos queramos. Sin embargo cada proyecto puede ser visto 150 veces, que se activan cuando publicamos dicho proyecto. De todas formas si lo dejamos de hacer público y lo volvemos a publicar de nuevo, el contador de visualizaciones vuelve a cero, lo cual nos da un amplio margen de trabajo en el aula.
Es una aplicación que si bien no ha sido creada para uso exclusivo en docencia, ya que por el tipo de análisis estadístico lo hace más útil para promoción de video y marketing, posee una aplicación muy útil para la creación de contenido adaptativo en el aula.
La forma de trabajo, es similar al de otras aplicaciones de enriquecimiento de vídeo. Se carga un vídeo, que se puede parar en el minuto que queramos para introducir preguntas, comentarios, etc. En la siguiente imagen se muestra el entorno de trabajo (click ampliar imagen).
Como puede verse, permite introducir varias interacciones simultáneamente en un punto determinado del vídeo. Para manipular dichas interacciones, podemos programar que el vídeo realice una pausa o fijar un tiempo de aparición mientras el vídeo sigue reproduciendose.
De la misma forma que Touchcast, en Vidzor podemos insertar muchos tipos de interacciones, como se puede observar en la imagen anterior, desde formularios, mapas de Google, o links a otros vídeos. Esta última herramienta, los links a otros vídeos, resulta muy útil si queremos realizar algún tutorial de un programa informático o convertir un fotograma de cualquier lección o materia en una infografía interactiva, ya que podemos parar el vídeo e insertar diferentes links en diferentes puntos del fotograma. De esta forma, cada vez que realicemos un click sobre un elemento del fotograma nos enviará a un vídeo específico que amplía la información sobre ese elemento.
Eduapp
Sin embargo, la opción que más me ha interesado de esta aplicación es la herramienta eduapp, con la que podemos realizar aprendizaje adaptativo en clase. Como se puede ver en la siguiente imagen, nos permite introducir en cualquier punto del vídeo o al final del mismo, una o varias preguntas de opción múltiple, como hacen otras aplicaciones. La diferencia la encontramos en la pestaña evaluación, como se puede ver en las imagenes.
La pestaña evaluación permite definir qué acción tiene que realizar el alumno en función de su comprensión del vídeo y el resultado de los cuestionarios realizados. Como se puede observar, podemos determinar que el alumno tenga que repetir el test hasta que lo realice bien. De esta forma no podrá avanzar en el vídeo y en la explicación de conceptos hasta que no haya asimilado los anteriores, como se suele hacer en el modelo Flipped Mastery.
Si no optamos por esta modalidad, podemos re-orientar a nuestros alumnos tanto si no han superado el cuestionario como si lo han realizado correctamente. De esta forma, si el resultado del test determina que un alumno no ha asimilado los conceptos, podemos hacer que visualice otro vídeo de refuerzo y una vez lo haya visto y/o superado, puede volver al vídeo de origen para seguir con la lección. De igual manera, un alumno que haya superado la prueba de test, puede ser dirigido a otro vídeo donde puede ampliar conocimientos. De esta forma el aprendizaje se va adaptando a las necesidades y evolución de cada alumno. La idea final es que estas visualizaciones de vídeo adaptativo, puedan ser realizadas en clase (in class Flip) bajo la supervisión del profesor, para controlar la evolución de cada alumno.
José Julián Prieto
Coordinador TICs y profesor de Economía e informática
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