Continuando con la entrada anterior…

5 ) Los profesores no están preparados, confunden «transformación» por «sustitución«:

Es importante asegurarse de que los profesores han sido formados correctamente para utilizar los dispositivos en el aula. Antes de dárselos a los estudiantes, los docentes deben sentirse cómodos habiéndolos usado primero. Deben tener claros los objetivos de aprendizaje, los procedimientos, las actividades, las apps más importantes, los recursos online, así como el manejo básico del dispositivo. Para ello, es importante que se programen todo tipo de sesiones (conferencias, talleres, seminarios…) que conduzcan al dominio de la herramienta. Sin embargo, tan importante como esa formación inicial, es hacer comprender al profesorado implicado que el proyecto se justifica realmente si hay una TRANSFORMACION del modelo, no una simple SUSTITUCIÓN de unos recursos («analógicos») por otros digitales.

6) Otros proyectos basados en metodologías innovadoras no están alineados con el despliegue 1:1:

En distintas formaciones con responsables de Centros Educativos y ante la pregunta «¿Existen y están desplegadas metodologías específicas para el cambio que sustenten de modo coherente la integración de un proyecto 1:1 (Challenge Based Learning, PBL, Inteligencias Múltiples, Aprendizaje Social, Aprendizaje Dialógico, Comunidades de Aprendizaje, Aprendizajes Inclusivos…)?,  la respuesta (de una muestra de casi 300 directivos) fue esta:

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…es decir, casi el 60% de los responsables educativos conciben (o ni si quiera se lo plantean) que los proyectos TIC (1:1), son independientes de los proyectos estratégicos de tipo metodológico. Esto es como decir que hay que aprender a utilizar un robot de cocina, pero que ese aprendizaje es independiente del hecho de elaborar un buen plato.

7) Los familias no están convenientemente informadas:

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El nivel de impacto de este tipo de proyectos, basados en dispositivos móviles (1:1), en el entorno educativo es muy superior al de otras tecnologías. La implicación de las familias es esencial para el éxito. Hacerles partícipes de los objetivos, los resultados esperados y los problemas que seguramente encontraremos es absolutamente esencial. Si las familias no están implicadas, el desconocimiento se transformará en inseguridad y falta de confianza y todo ello pondrá en peligro el éxito del proyecto.

8) No se ha tenido en cuenta o se ha descuidado el plan económico y financiero:

Los costes asociados a este tipo de proyectos no se limitan al pago del dispositivo, hay que tener en cuenta la infraestructura tecnológica necesaria para el correcto despliegue (red, sistema de gestión de dispositivos…), los materiales didácticos (apps, ebooks, otro tipo de contenidos…), la formación del profesorado, los seguros y la propia financiación.

9) No existe la figura del responsable del proyecto:

Resulta esencial la figura del responsable del proyecto 1:1 y su perfil, a nuestro juicio, debe ser más educativo que tecnológico. Además, es necesario que ésta persona cuente con horas de dedicación al mismo, liberándolo de otras tareas (normalmente de clases, y esto es otro coste a tener en cuenta). Esta persona debe ser el referente para el resto de los profesores implicados en el proyecto y, por supuesto, servir de puente entre la dirección, las familias y otros agentes implicados.