Mercedes Irache Sáenz Baños nos cuenta más de su experiencia, el reto: motivar a sus alumnos. Gracias de nuevo, Mercedes.

Siempre estoy dándole vueltas a qué actividad podría realizar en clase, si les gustará, si les resultará útil… A veces me resulta difícil, 2o ESO es difícil, pero con adaptación curricular… eso es realmente un reto diario… Me paso el día, navegando por internet y leyendo blogs de profes, artículos de revistas…, a ver si me ilumino y consigo motivarlos con actividades dinámicas, alguna gamificación, o alguna actividad que favorezca el trabajo en grupo, y que de alguna manera sean ellos, quienes dirijan su propio aprendizaje. Ya que, la única manera de que rindan y trabajen es que se sientan dueños de su aprendizaje.

Así que un día pensando, me dije “¿y si por un día, les dejamos que sean ellos mismos los que realicen una actividad para sus compañeros?”.

La verdad, es que al principio, me pareció ir un poco en “contra natura” ya que parece que buscar, programar o realizar actividades es el trabajo del profesor… Pero como vivo con la filosofía de darle la vuelta a las clases… me tiré a la piscina.

Lo primero, busqué una herramienta sencilla de utilizar, variada, y que a su vez, los alumnos no tuvieran que perder tiempo en registrase continuamente. Así, descubrí Educaplay. Es una aplicación gratuita, que permite realizar un banco amplio de diferentes actividades, como relacionar, mapas interactivos, sopas de letras, crucigramas, ordenar palabras, test, videoquiz… y sólo te registras para diseñar una actividad.

Al comenzar les di un par de requisitos generales:  La herramienta a utilizar: Educaplay.

 El tema tenía que estar relacionado con los órganos de los sentidos.

Pues mi sorpresa fue, que todos se pusieron manos a la obra, y fueron creando sus actividades. Mientras tanto, yo estuve observándolos, y me di cuenta de que estaban no sólo siendo creativos, guiando su propio aprendizaje, sino que intentaban de alguna manera ser empáticos con sus compañeros y buscaban verdaderos retos entre sí. Vamos, que en su afán ganador, intentaban buscar los conceptos más abstractos y las palabras más difíciles, y de alguna manera, jugando, las iban interiorizando.

Os dejo el ejemplo de actividad que les propuse.

Espero que mi experiencia os sirva para dinamizar un poco las clases y aprovechar las cabecitas de nuestros chicos…

He de decir, que a mí, me está resultando bastante útil. Por un lado, porque los engancha a trabajar (que a estas alturas del curso, no es fácil) y por el otro, porque se crea un clima dinámico de cooperativismo y superación en el aula. Esto provoca que los chicos entre sí, se ayuden y que su ritmo de aprendizaje aumente significativamente, ya que se reduce bastante su absentismo porque disfrutan en clase.

Mercedes Irache Sáenz Baños