La profesora Lola Millán, del Colegio San Gabriel de Zuera (Zaragoza), primer Flipped School de España, nos cuenta su experiencia con los Paisajes de Aprendizaje:

La primera vez que me explicaron qué era un paisaje de aprendizaje y para qué servía pensé que la idea me gustaba mucho pero que no sería capaz de llevarla a cabo… Leí mucho sobre el tema en artículos e infografías, y me pareció que era una forma muy realista de atender a la diversidad en el aula.

También me ha servido para programar, ya que así los elementos del currículo están relacionados y encuentran sentido. Esta metodología precisa de una planificación de actividades donde los alumnos pueden trabajar de manera cooperativa pero también individualmente respetando el ritmo de cada uno.

Con un paisaje de aprendizaje consigues captar la atención del alumno, ya que le presentas una imagen visual, donde está todo el trabajo que tiene que realizar de manera muy atractiva. Me parece importante que los alumnos tengan claro lo que van aprender y cómo. Además, en un centro como el nuestro, que trabaja sin libros de textos, puede utilizarse como un libro interactivo donde pueden encontrar todos los contenidos.

Te da la oportunidad de hacer un paisaje de aprendizaje de un solo contenido, de un proyecto o de todos los contenidos de un curso escolar.

También te permite conocer las debilidades y fortalezas de cada alumno y hacer que sea consciente de sus capacidades (meta cognición).

En mi experiencia, he utilizado varias aplicaciones ThingLink y genial.ly, las dos son muy intuitivas, aunque me siento más segura con ThingLink, por el momento.

Para el proyecto “Somos detectives“, que he realizado con mis alumnos de 5º de Primaria, he creado este paisaje de aprendizaje para introducirles lo primero que vamos a trabajar en el proyecto. Dentro del paisaje he insertado varios vídeos para trabajar el enfoque FLIPPED y una técnica que me parece muy interesante y valiosa para el visionado de los vídeos “La técnica Cornell”.