Cuadro de mando de analíticasCada vez más profesores me piden que les introduzca a la analítica del aprendizaje, no solo los que imparten en MOOCs o en la universidad. Los profesores de secundaria también se suman a la necesidad de cambio. La primera vez que me lo piden siempre les digo lo mismo:

En cierto modo ya la estás aplicando. Lo que te falta son nuevas herramientas y aproximaciones de análisis, puesto que la observación en el aula ya no te sirve para comprender entornos virtuales de aprendizaje.

Los profesores que me piden aprender a analizar es porqué están viviendo un cambio tecnológico en sus aulas. Los dispositivos electrónicos ya no se limitan a la pizarra digital interactiva. La didáctica ya no se centra en el profesor. El protagonista es el alumno y la práctica en el aula ha roto con la esclavitud del papel y lápiz. Netbooks, portátiles, tabletas, iPads, híbridos y otros dispositivos electrónicos están irrumpiendo con fuerza en las aulas. De la misma manera, hay que contar también con que estos dispositivos vienen acompañados de un entorno virtual de aprendizaje, acceso a recursos interactivos, recursos multimedia, enlaces a web 2.0, Apps… Los alumnos ya no solo interactúan en el aula real. El aprendizaje se extiende a lo virtual.

El contexto educativo está en rápida evolución. Se está trascendiendo hacia un estado tecnológico que necesita de otros acercamientos para hacer el seguimiento de los alumnos, mejorar la tutoría, obtener datos objetivos para la evaluación, predecir riesgos académicos o simplemente comprender el comportamiento del grupo clase. En este cambio continuo los profesores son conscientes de la necesidad de adquirir otras aproximaciones metodológicas, más allá de la observación, para comprender y mejorar el binomio enseñanza-aprendizaje.

La observación en el aula ya no es la herramienta definitiva para comprender los nuevos procesos en entornos virtuales de aprendizaje. Es la analítica del aprendizaje el recurso clave actual para analizarlos, visualizarlos, entenderlos y mejorarlos.